Por Alejandra Gavigán

La familia Romero Marcuzzi dio sus primeros pasos en el mundo del vino cuando Roberto Romero comenzó su primera bodega hace cuatro décadas en Tolombon, Salta, a pocos kilómetros de Cafayate, donde encontraron un exquisito terroir.

Allí, entre los viñedos y largos veranos familiares, comenzó el desarrollo de los pilares del proyecto actual: un fuerte compromiso con el sitio, la mayor dedicación al trabajo y un gran amor y respeto por el terroir que ha crecido a través de los años. 

Fue en esa primera bodega que Lucía, nieta de Roberto Romero y hoy directora de El Porvenir de Cafayate, dio sus primeros pasos. En el año 2000 el equipo del Porvenir decidió crear un nuevo proyecto con un mercado objetivo más exclusivo, diseñando una bodega premium con pequeños lotes de vino de muy alta calidad, limitando su producción a un máximo de 200.000 botellas por año. 

Con este objetivo claro, adquirieron una antigua bodega que actualizaron con inversiones en infraestructura y tecnología, al mismo tiempo que restauraron con éxito los viñedos de 50 años de Torrontés y Tannat. Durante ese período también plantaron vides de Malbec, Cabernet Sauvignon, Merlot y Syrah (entre otros varietales) en un nuevo viñedo. 

Hoy en día, la bodega con sede en Cafayate está dirigida por Lucía Romero-Marcuzzi, que trabaja con un distinguido equipo de 50 personas siguiendo el legado de sus antepasados con un notable espíritu innovador para mostrar orgullosamente a Argentina y al mundo la huella de Cafayate en cada uno de sus vinos.

Recientemente, la bodega sumó como enólogo jefe a Francisco “Paco” Puga (foto), uno de los grandes referentes del vino cafayateño.



La bodega –que elabora escasas partidas de vinos de alta calidad- cuenta con viñedos a 1.750 msnm, ubicados en el Valle de Cafayate, un terroir único por su clima extremo y su marcada amplitud térmica, consecuencia de la altura, que se demuestra en la complejidad de los vinos, produce y comercializa dos líneas de vinos:

. LABORUM: la expresión varietal de Cafayate, compuesta por vinos Single Vineyard: Malbec, Cabernet Sauvignon, Tannat, Syrah, Torrontés, Torrontés Oak Fermented, Torrontés de Otoño, Chardonnay, Malbec tardío y Rosado de Malbec.

. AMAUTA: que  significa “el hombre sabio” en la cultura andina. Es una línea compuesta por varietales como Malbec, Tannat, Torrontés y los blends: Corte I,II,III y IV, respectivamente.

Asimismo, la bodega cuenta con su vino ícono “El Porvenir”, un corte de al menos cuatro variedades tintas que pueden ir modificándose cada año, ya que se eligen los mejores vinos de cada cosecha para que integren este vino. “El Porvenir” pasa 18 meses de guarda en barricas nuevas de roble francés y americano y casi 2 años de guarda en botella antes de ser comercializado.

Los vinos de Laborum son elaborados a partir de uvas cultivadas en cuatro distintos terruños de la zona de Cafayate, con distintos perfiles de suelo y ubicados a distintas alturas: Finca Altos Los Cardones (1.750 msnm, con sistema de conducción de espaldero alto), Finca Río Seco (1.700 msnm, con sistema de conducción de espaldero alto), Finca El Retiro (1.650 msnm, con sistema de conducción en parral) y Finca Alto Los Cuises (1.850 msnm, con sistema de poda en vaso). Por ello en cada etiqueta se verá el nombre del viñedo de donde provienen las uvas con las cuales se elaboró ese vino.

La buena noticia es que los vinos de esta destacada bodega argentina están presentes en el mercado local y están disponibles en restaurantes y tiendas especializadas.

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