Por Alejandra Gavigán

El otoño se anticipó un poco antes al 21, ese 14 de marzo. Hacían 25 grados, muy atípicos para nuestro subtropical Paraguay. Llegamos a la casa de In Vino Veritas Club Privado, donde nos esperaban 4 vinos que, como diría Robert Plant: son un ‘stairway to heaven’, además de llevarnos sin escalas a varias de las más afamadas regiones vitivinícolas de España. 

Todos los protagonistas enológicos de la noche son hijos vitivinícolas de la familia Torres, que con pasión se ha dedicado a la elaboración de vinos durante más de 140 años, sin desviarse de las raíces españolas. De hecho, el motivo principal de la cata era la presentación en sociedad de estas grandes etiquetas, recién llegadas al mercado local.

Comenzaba la noche y nuestra primera escala fue Galicia, puntualmente un vino de la famosa denominación de origen Rías Baixas, denominado Pazo das Bruxas, de la cosecha 2016. Este vino rinde homenaje a las tradiciones y naturaleza de Galicia, donde se dice que habitan seres mágicos. Curiosamente, el nombre se debe a las brujas gallegas que habitaban la región, donde hacían sus pedidos a la naturaleza con danzas o encantamientos para obtener las mejores frutas, como las cepas de Albariño que dan vida a este delicioso blanco joven, fresco y muy aromátoico.

Luego llegó un vino que, por su nombre, nos hizo a todos tocar el cielo. Celeste Crianza 2014 está hecho de Tempranillo, como corresponde a los vinos de la Ribera del Duero. Y posee una etiqueta inspirada en formaciones estelares, porque sus cepas reposan a 900 msnm. Se destaca por sus aromas a café y frutos negros, sabor a frutos negros, con una tanicidad media pero a su vez este vino es aterciopelado, elegante, cálido y de largo final en boca.

Seguía la noche y fuimos directo a Valencia, el chef Marcos Arcos, el encargado del catering, sorprendió a todos con una paella (lastimosamente sin conejo) que era el plato con el cual entraríamos al purgatorio, porque jugar con las estrellas era un pecado por el cual debíamos pagar.

Purgatori 2014, elaborado bajo la DO catalana Costers del Segre, es un ensamblaje de Garnacha, Syrah y Cariñena que hacía repetir a los presentes la siguiente plegaria: ¡Qué gran vino! Todo esto se debía a su Intenso aroma de frutas rojas maduras con finas notas ahumadas y lácteas.

Para terminar la noche con alabanzas, el último descorche fue Salmos 2014 DOCa Priorat, vino blend de Garnacha, Syrah y Cariñena que hizo a todos recitar su intenso y concentrado aroma de arándanos, con matices tostados  y de pan de especias. Terminamos la noche recitando cual salmo en misa; la sedosidad de este vino, su elegancia y sobre todo al igual que el Purgatori: su sutileza.

Estos vinos elaborados por Bodegas Torres de España y representados en el país por el Grupo ACSA ya están disponibles en tiendas especializadas y restaurantes.

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