Por Ania Smolec
¿Cuántas veces debió empujar el corcho dentro de la botella, rompió en pedacitos la cápsula o hizo más fuerza de la necesaria y terminó convidándole vino al piso? A continuación algunos consejos para descorchar su vino favorito como un profesional.
No hay duda: ¡necesita un descorchador! ¡Y necesita uno bueno! En las tiendas de vino puede encontrar diversos tipos de sacacorchos, simples o modernos, de lujo o clásicos, de muchos colores y diseños, incluso existen algunos muy modernos, como el de aire comprimido o con termómetro incorporado para medir la temperatura de servicio.
Entre todos ellos hay uno que merece toda su atención. Se trata del más simple de todos. El sacacorchos de los sommeliers. Una herramienta que luce como una navaja suiza y que fue patentada por el alemán Karl Wienke en 1882.
¿Por qué es tan bueno y recomendable? A los garzones y sommeliers les encanta porque es muy portátil. Puede mantenerlo en el bolsillo o en el bolso de mano.
También porque permite dos acciones en una sola herramienta. Con este tipo de sacacorchos puede cortar la cápsula de metal y extraer el corcho.
Es cierto. Exige ciertas competencias básicas, exige practicar un poco más, pero con nuestra guía será muy fácil. Lamentablemente hay que tener cuidado con el detector de metales. Los aeropuertos ya cuentan con toda una colección.
Muchos amantes del vino prefieren sacacorchos tipo mariposa. Esta herramienta, que fue inventada en 1939, tiene dos palancas o alas, una a cada lado del tirabuzón.
Mientras usted tuerce el tirabuzón en el corcho, las dos alas se levantan. Luego sólo queda empujar las alas hacia abajo y el corcho se extraerá con mucha facilidad y delicadeza. La ventaja de este descorchador es la sencillez de su uso. El corcho salta prácticamente en un solo movimiento suave.
¿Por qué los profesionales no aprecian este tipo de sacacorchos? Pues el control sobre el tirabuzón es más limitado y muchas veces durante la operación se termina destrozando el corcho. ¡Y nadie quiere tener fragmentos de corcho en el vino!
El corcho intacto sirve para tapar la botella cuando se quiere guardar el vino para el otro día. Además es un recuerdo de un gran vino o de un momento de celebración. Incluso puede echar a volar su imaginación y crear un objeto de arte o decoración. Hay muchos buenos ejemplos de artesanía con corchos.
EN DOS TIEMPOS. ¿No nos parece espectacular cuando el sommelier descorcha una botella de vino en pocos segundos? La botella casi vuela en el aire, no hay pérdida alguna de líquido y el corcho, intacto y húmedo, nos es ofrecido como una ofrenda.
Pero no olvidemos que los sommeliers poseen una gran formación de servicio y muchos de ellos tienen años de experiencia. Sea paciente y perseverante y, sobre todo, practique mucho.
Para iniciarse en este ritual, primero cuide la botella y realice cada etapa lentamente. Mantenga la botella en posición vertical. Puede asegurarla sobre la mesa. Con el pequeño cuchillo escondido en el sacacorchos corte la cápsula, justo bajo la curva del cuello de la botella. Tenga cuidado con los dedos. La falta de atención puede provocar un corte con el filoso metal de la cápsula.
Ajuste el tirabuzón en el mismo centro del corcho para no romperlo. Apoye con la primera palanca sobre la mesa hasta que se extraiga la mitad del corcho. Luego posicione la segunda palanca. Repetimos la operación con cuidado de no hacer ruido. Al quitar el corcho no debe producirse un estruendo, sino un sensual suspiro. ¡Voilà! Ya estamos listos para servir el vino.
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Descorchando el vino como un profesional
La periodista especializada Ania Smolec preparó para el Wine Blog de Viña Concha y Toro un muy interesante artículo sobre el tema, que reproducimos a continuación.
Enero 02, 2015