Por Luis Fioretti

Muchos lugares nos ofrecen cartas llenas de recetas de cocina internacional, pero les falta algo. Se trata de la diferencia entre hacer un plato europeo, ¡y hacerlo como si estuviésemos ahí!

Esta precisamente es la clave que da vida a La Parisienne Bistró, “Un rincón francés en Asunción”, como lo describen Jean-Philippe Bierre y Bettina Torres, el joven matrimonio propietario del local.

En sí, se trata de una mezcla de virtudes culinarias: por un lado está el bistró al más puro estilo francés (cierta informalidad en la propuesta más una carta breve, pero sin perder de vista la calidad de lo que sale de la cocina); por otro, la confitería – panadería; y por si fuera poco, una rotisería que nos devuelve a nuestro país.

Ubicado en pleno Villa Morra, en la esquina de Lillo y Malutin, el bistró abrió sus puertas a principios de abril último, aunque el proyecto estuvo en mente de sus dueños durante 4 años, y quizás antes, con su propia historia, iniciada cuando se conocieron estudiando en Suiza.

Ella, paraguaya, viajó para estudiar Gestión Hotelera. Él, francés, no podía ser menos que un apasionado de la cocina, y por supuesto sabe mucho de la de su país, pero además le fascina lo que cada nación aporta a la gastronomía.

PERFIL. El lado francés del local está marcado por su faceta de bistró y panadería – confitería. Aquí encontramos delicias gastronómicas típicas de Francia, pero con un detalle clave en juego: “La Parisienne no busca ofrecer solo recetas europeas, sino hacerlas como si se estuviese en Europa”, afirma Jean-Philippe.

Asegura que es difícil encontrar algo así por aquí, dada la diferencia entre las materias primas, pero fundamentalmente, por la elaboración que habitualmente se da localmente a recetas de otros países, que terminan por lo general en resultados diferentes, en su opinión.

Para lograr el cometido en sus productos, La Parisienne cuenta con un staff de cocina idóneo, desarrollado con expertos que lo pusieron a punto, incluso venidos de Francia. Pero el “Ok” final en la manera de elaboración y los sabores logrados en cada uno de los platos lo da el propio Jean-Philippe, quien no se detiene hasta saborear lo mismo o más próximo que en Francia. “Hicimos muchas pruebas para llegar, por ejemplo, al corazón del pan de chocolate” cuenta.

Entre sus elaboraciones más destacadas figuran las tortas, masitas, facturas, como el “eclair” de chocolate y de dulce de leche, la famosa tarta de manzanas “tarte tatin”, los “croissants” sin relleno, el “pain au chocolat”, la “Crème Brulèe”, y el pan Buguette, entre otras delicias.

Así, la carta de LP se inspira en la cocina francesa trabajando la materia prima local para lograr su meta, pero preparada de tal modo que un francés piense que está en su país.

A la par, se fusiona con platos infaltables para nuestro público, rol encarado por su rotisería que consiste en un buffet muy tradicional, nutrido de elementos como surubí, salmón, costilla de cerdo, bife angosto, ensaladas y pastas varias, milanesas con puré, lomito al champiñón, sopa paraguaya, chipá guasú, arroz quesú, strogonoff y lomito de pollo, entre otras opciones.

Por otra parte, la casa tiene un servicio poco habitual en nuestro medio: productos sellados al vacio. La idea es que la gente pueda llevar la comida hecha a su casa, en condiciones de frescura óptima al momento de abrir su paquete y calentarlo en el horno. El proceso permite que, al estar el plato cocido y guardado al vacío, se evite la proliferación de bacterias. Sellado tal manera, estas no pueden más entrar.

“Guardamos nuestros productos en visicoolers, porque la cadena de frío ya empezó, ofreciendo un producto que pueda aguantar hasta 10 días, sin ningún problema”, dice Bettina, por su parte. Así, la gente llega, mira los exhibidores, elige su comida, la lleva a su casa, la calienta por dos o tres minutos en el microondas o mediante la técnica del “baño María”, y la tiene en perfectas condiciones sin nada más que hacer, ¡salvo agregarle condimentos a su gusto!

CORAZÓN GRANDE. La Parisienne tiene capacidad para 64 comensales en 3 ambientes: un salón principal, junto a otro que puede estar abierto o, en caso de mucho calor, cerrado con aire acondicionado, mientras que el tercero es una pequeña “terraza” que ocupa la esquina que da a la calle, donde pueden entrar hasta 7 u 8 personas.

La confitería - panadería goza de un amplio espacio repleto de visicoolers con sus productos. Y claro, no podía faltar una pequeña cava con vinos de predominio argentino y chileno. Al fondo, atravesando la confitería, encontramos el buffet.

En general, el lugar goza de una decoración minimalista, donde predominan los colores claros y cremosos, que sin dudas será bien visto en general. Y goza de una envidiable luz natural. “Las meriendas suelen recibir visitantes más juveniles, pero en general nos visitan personas de todas las edades”, afirman sus dueños.

Sus Horarios van de domingos a miércoles de 07.00 a 23.00, y de jueves a sábado de 07.00 a media noche.

LA PARISIENNE
Lillo esquina Malutin
Tel. (021) 602901
Fan page en Facebook: https://www.facebook.com/LaParisienneBistro.