Por Alejandro Sciscioli
Tanto para asistentes como para organizadores, la edición 2017 Expo Vino Paraguay culminó anoche con las copas llenas de emociones, buenas experiencias y un sinfín de excelentes vinos catados.
Haciendo un rápido repaso de números puede decirse que, en dos noches, un total de 3.000 personas colmaron las instalaciones del centro de eventos Talleyrand Costanera, donde 22 expositores pusieron en degustación unas 300 etiquetas.
También hay que destacar la apuesta de los importadores, quienes como nunca trajeron a enólogos, sommeliers y exports managers de sus bodegas representadas a los efectos de lograr que el consumidor tenga información de primera mano sobre las etiquetas que iban llegando a sus copas.
Otro aspecto a destacar, antes de iniciar mi clásico recorrido de descripción de las referencias degustadas, es el comportamiento ejemplar del público: ni un exceso, apenas unas pocas copas rotas.
CATAS Y CHARLAS. Ayer “me quejé” del poco tiempo disponible para catar, teniendo en cuenta las obligaciones que surgen durante el encuentro. Traté entonces de aprovechar mejor el tiempo disponible en la segunda jornada, catando desde bien temprano todo aquello que llamara mi atención.
Así, a mi copa llegaron nuevamente viejos conocidos y nuevos amigos. Entre los catados quiero destacar los siguientes:
. Donnafugata Sherezade Sicilia IGT Nero D’Avola 2010, muy frutado y agradable. Se merece un sitio en tu copa.
. Colonia Las Libres Bonarda 2012, deliciosamente frutado y con una refrescante acidez que enamora. No pude resistir la tentación de probarlo una vez más: su relación precio calidad es definitivamente un factor que me hace comprarlo una y otra vez.
. Benegas Lynch Libertad Estate Meritage 2008, un vinazo que ya está entre mis preselccionados para destacar entre los mejores del 2017 que publicaremos en la web a fin de año. Un ensamblaje macho a puro cuerpo, acidez y taninos. EXCELENTE, así, con mayúsculas.
. Monteviejo Lindaflor Malbec 2011, siempre infalible: complejo y elegante en nariz, redondo en boca. Un lujo hecho vino.
. Cecchi Chianti Classico DOCG 2014. Muy buen embajador vitivinícola de la famosa región italiana, que tiene el sello del “Gallo Nero” como indicador de una calidad que se percibe a primera nariz.
. Cecchi Chianti Classico DOCG Riserva 2013. Mejor diplomático del vino que su hermano menor mencionado en el párrafo anterior, también portador del “Gallo Nero”. En este vino se percibe más claramente la madera, aunque la fruta de ninguna manera queda de lado. Me encantó.
. Trivento Golden Reserve Cabernet Sauvignon 2013, un vino que ayuda a comprender por qué cada se habla más y mejor de los vinos argentinos elaborados con esa variedad.
. Viña Maipo Limited Edition Handpicked Syrah 2012. Es elaborado con uvas cultivadas en Buin, Valle del Maipo, Chile, una zona de la cual estoy viendo y probando cada vez más vinos, todos de muy buenos para arriba. Y este no es la excepción
. Robert Mondavi Private Selection Zinfandel 2015
. Robert Mondavi Private Selection Pinot Noir 2015, un bombazo de fruta y elegancia.
. MontGras Intriga Cabernet Sauvignon 2012. Quiero detenerme en esta etiqueta un momento: compleja y elegante en nariz (con apenas una sutil presencia de pimiento rojo) y con una boca que enamora. Fue mi primera vez con él, y de ninguna manera será la última. Habrá muchas reincidencias.
. Domaine Bousquet Grande Reserve Malbec 2013, tan fácil de beber que “da miedo”: desaparece el vino en la copa dejándonos con ganas de más.
. Marqués de Casa Concha Cabernet Sauvignon 2012 y 2014. Con esta etiqueta de Viña Concha y Toro pude hacer un divertido ejercicio: ver el modo en que el tiempo ayudó a evolucionar a esta noble etiqueta. Impecables ambos, por supuesto, aunque el más viejito está listo para ser disfrutado exactamente ahora, mientras que el más joven se merece uno o dos años de guarda.
. Garzón Albariño Reserva 2016, tiene todo lo que se puede esperar de un vino de la variedad: intensidad aromática y mucha frescura en boca, aunque por efecto del clima y la insolación de la zona de origen (las cercanías de Punta del Este, en Uruguay) hacen que tenga más cuerpo que un Vinho Verde portugués o un Rias Baixas gallego. Muy, pero muy recomendalbe.
. Garzón Sauvignon Blanc Estate 2016, muy interesante en nariz, fresco en boca.
. Garzón Single Vineyard Tannat 2015, elegante y sedoso aún cuando tuvo nada menos que 18 meses de guarda en madera. Muy recomendable.
. Finca Las Moras Gran Syrah 2013, elaborado 100% con la cepa señalada en la etiqueta, aunque ensamblado a partir de uvas cultivadas en los tres principales valles productores de San Juan: Tulum, Zonda y Pedernal. ¿El resultado? Un vinazo que muy probablemente esté en mi lista de best buys del año.
. Beringer Founders Estate Pinot Noir 2013, bombazo de fruta en nariz y frescura en boca. ¡No dejen de probarlo!
. Bernger Knights Valley Cabernet Sauvignon 2010, un vino tan interesante que te hace sentir una atracción especial hacia esta cepa.
. Beronia Rioja DOCa Reserva 2012, es tan, pero tan bueno y está a un precio tan, pero tan conveniente, que sin dudas estará en mi top ten del año y en mi lista de best buys. Verdaderamente imperdible.
. Familia Deicas Preludio Barrel Select 2009. Tiene corazón de Tannat, más Cabernet Sauvignon, Cabernet Franc, Merlot y Petit Verdot. Un vinazo que todo aquel que se precie de ser wine lover debe conocer.
. Luigi Bosca Riesling Las Compuertas 2016. Al probarlo entendí por qué el Master of Wine Tim Atkin lo premió recientemente con 93 puntos: intenso y mineral en nariz y de excelentes cuerpo y acidez en boca. Otra etiqueta que no puede perderse.
. Bouchard Père & Fils Gevrey-Chabertin 2010, vinazo que ya está entre mis favoritos de la Expo. Elegante en nariz y sutil en boca, es exactamente lo que uno espera al probar una etiqueta elaborada en una de las apelaciones más prestigiosas de Borgoña. Maravilloso.
. Zonin Castello D’Albola Chianti Classico DOCG, también respaldado por el “Gallo Nero”, tan fácil de beber que enamora
. Artífice Terra Carmenere Argentum 2012, frutal y de taninos suaves, fácil de beber
. Errazuriz Don Maximiano Founder’s Reserve 2008. Uno de los grandes vinos de Chile, sin dudas: nariz compleja y elegante, con notas y trazas que no paran de aparecer en la medida que se airea la copa; boca estupenda, redonda, con todos los atributos que se esperan de un vino de este nivel. Maravilloso.
. Viñedo Chadwick 2011. Solamente diré una cosa: WOOOOWWWWW
Los dos últimos vinos mencionados en el listado fueron dejados para cerrar la Expo. Es que todo estuvo tan bueno, tan bien desarrollado y planificado, que se merecía un cierre excepcional, con vinos superlativos.
Realizados los saludos de rigor para la despedida, me dirigí a la puerta a buscar al chofer contratado que manejaría mi auto (recordemos el sabio lema “si ha bebido, no maneje”) y, mientras iba a casa, pensaba el modo en que esta crónica sería organizada.
¡Nos vemos en 2018, en una nueva edición de la Expo Vino, para continuar rindiendo culto al noble fruto de la vid!
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