Por Florencia Parodi

El director técnico de Escorihuela Gascón, Matías Ciciani, en compañía de Renzo Monge, export manager de la bodega, visitaron nuestro país en una gira que incluyó cenas maridaje y eventos en diferentes restaurantes de Asunción, de la mano de su importador, Frutos de los Andes. 

Conversamos con Matías, quien actualmente se encuentra a cargo de los viñedos y toda la parte de enología de la reconocida bodega mendocina.En su paso por Paraguay nos contó de su entusiasmo ante un mercado en pleno desarrollo y al que le avizora “mucho futuro”. 

Tiene 35 años y 17 cosechas a cuestas, mucho entusiasmo y gran preferencia por los desafíos a la hora de hacer vino, que para él, es algo muy similar a cocinar. Se incorporó a Escorihuela Gascón hace 6 años y si bien es una de las bodegas más antiguas de Mendoza (fue fundada en 1884) a la hora de crear, la libertad es la norma. 

“Hoy Escorihuela Gascón está en una posición en la que no desentona con lo clásico pero tampoco pierde frescura e innovación. Yo ingresé con una libertad absoluta para venir con este impulso nuevo y expresar mi creatividad. Y todos los años puedo lanzar proyectos nuevos”, nos comentó. 

De hecho, cuando le consultamos cómo definiría a Escorihuela, sin dudar dijo: “Es tradición y experiencia de años combinada con la innovación y la libertad para crear”.

LAS JOYAS DE LA BODEGA. La calidad de los vinos de Escorihuela no se discute, sino al contrario, se celebra en cada copa. Y según el joven enólogo, el alma de estos vinos está en los viñedos que posee la bodega, entre los que se encuentra la Finca Cordón de El Cepillo, al que Matías considera: “uno de los mejores viñedos del mundo”. 

Explicó que se encuentra en la zona de El Cepillo en San Carlos, Valle de Uco, a 1.200 MSNM. “Cuando llegué me encontré que tenían un viñedo certificado orgánico y biodinámico. De hecho, creo que son solo 5 las bodegas (mendocinas) que tienen certificado Demeter […] Entonces pude trabajar en base a los viñedos que para mí es donde está el secreto”. 

Además de los tres viñedos que posee Escorihuela, también han creado una importante red de unos 150 productores que les proveen uvas de la más alta calidad. 

LOS VINOS DE ESCORIHUELA. Lo más importante para el equipo de la bodega es transmitir, en cada botella, esta calidad que crece en el viñedo, combinada con el conocimiento que han obtenido a lo largo de la historia. Y en esta intención, el terroir asume el protagonismo. “Hoy no podemos hablar de vino sin hablar de lugar”.

Durante los encuentros que realizaron en Paraguay (La Cabrera, Maurice, Stilo Campo y Mi Embajada), el enólogo presentó el espumante Escorihuela Gascón Extra Brut; el Pequeñas Producciones Chardonnay, Malbec, CabernetFranc, CabernetSauvignon y el blend ícono MEG, que fue recientemente elegido “Mejor Blend de Sudamérica” por la revista Decanter. 

Matías nos habló especialmente del Pequeñas Producciones Chardonnay: “Empezamos a elaborarlo con uvas de Gualtallary (Valle de Uco, antes se hacía con uvas de Agrelo, Luján de Cuyo). Lo elaboramos en 3 tipos de contenedores distintos, luego hacemos el corte, y un pequeño porcentaje del vino tiene fermentación maloláctica. Tiene mucha mineralidad y acidez de Gualtallary, pero combinado con todo lo que aporta la barrica”. 

En cuanto al MEG, blend de Cabernet Sauvignon y Malbec, el enólogo comentó que hace dos años lo relanzaron y salió con nuevas etiquetas. Este vino ha logrado posicionarse como un verdadero ícono de la bodega, recibiendo incluso la distinción de Decanter. En la ficha técnica, Matías expresa: “MEG es para nosotros sinónimo de elegancia. Es la búsqueda delequilibrio ideal entre el balance de aromas y sabores y la combinación de la frescura del Malbec con la estructura y complejidad del Cabernet Sauvignon".



EL HORIZONTE DE ESCORIHUELA. En cuanto al futuro enológico deEscorihuela, el director técnico de la bodega nos contó que el gran desafío en el que están trabajando es lograr vinos blancos de guarda: “Nuestro objetivo hoy es hacer vinos blancos de guarda y estamos trabajando mucho en la acidez. Fui a Borgoña y estamos yendo hacia eso, con la Sauvignon Blanc, que es biodinámico y orgánico, y la Chardonnay”. 

Además de los vinos blancos de guarda, también seguirán transitando el camino de la sustentabilidad, ya que para el enólogo, lo orgánico y sustentable cada vez tendrá más peso en el consumo. “Cuando tomas un vino certificado, estás certificando que ese vino nunca tuvo ningún tipo de químico en su elaboración, que hay un compromiso con el medio ambiente y con la gente que trabaja en ese viñedo. Hay una cultura dentro de ese producto que estás tomando. Eso debería ser muy importante para las personas, por eso, estamos buscando certificar todas nuestras fincas”. 

Los vinos presentados por Matías se encuentran disponibles en puntos de venta de todo el país gracias a Frutos de los Andes. Y si los seguís en las redes sociales te vas a enterar de todas las actividades y degustaciones que organizan periódicamente. ¿Ya los probaste? ¡Salud! 

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