Por Luis Fioretti
Las personas emanan algo que nos habla de su historia. Lo primero que pensé al ver a Pablo Tenguerian fue: “el tipo sabe de moda”. Y cuando me contó su recorrido hasta llegar a ser gerente de Ventas de la Bodega Escorihuela Gascón para Argentina, Paraguay y Uruguay, todo encajó. 
Pablo llegó al país para presentarnos tres nuevas etiquetas de la línea “Pequeñas Producciones”, pero antes de adentrarnos a los vinos, vale conocer quién los presentó: un hombre de familia con divertidas anécdotas, que lo llevaron por todo el mundo a vivir situaciones como la de vender zapatos en Nueva York en la tiendo de un amigo, a estar sentado en un desfile de moda en París al lado del mítico Michael Hutchence, cantante de INXS, criticando las prendas de una Claudia Schiffer en su esplendor como ama y señora de las pasarelas, para de allí representar grandes marcas de la moda mundial en Argentina. Y tras las famosas crisis económicas que de modo recurrente vive la Argentina dejar todo y encarar nuevos rumbos.
Nuestro entrevistado es un sommelier con olfato innato para los negocios. Otra anécdota: en la noche de su graduación en la Escuela Argentina de Sommeliers es contratado por el mismísimo Ernesto Catena, trabajando desde el año 2003 con sus vinos. “Una vez dentro de la empresa, mi primer trabajo fue atender un stand en una feria. Con los años fui ocupando distintos cargos en diversas áreas hasta que me tocó la comercial, y surgió mi encanto por vender, me encanta hacer negocios”, asegura.
Ahora sí, regresemos al foco de sus muchas visitas a Paraguay: los vinos. La última fue en septiembre, cuando nos presentó tres nuevas etiquetas de Escorihuela Gascón que se suman al mercado local: dos tintos (un Pinot Noir y un blend de base Malbec), junto a un blanco de la cepa Chardonnay.
Honrando su nombre, los tres vinos pertenecen al segmento de baja producción de botellas debido a su calidad, del rango Premium. Las variedades tintas llevan crianza en madera de primer uso, mientras el blanco se prepara con un porcentaje en madera, y otro en tanques de acero inoxidable. La particularidad de estos vinos es que apuntan a los consumidores amplios o experimentados, “pensados en quienes se tomaron todos los Malbec argentinos, los Cabernet chilenos y quieren algo más”.
De nivel top, El Conquistador Red Blend es un ensamblaje cuya base se nutre 80% de Malbec y el resto se acompaña distribuido entre Cabernet, Syrah y algo de Merlot, siendo cada cepa cultivada en diferentes zonas que brindan su mejor expresión. Su crianza pasa 10 meses en barricas francesas y americanas.
El Pequeñas Producciones Pinot Noir se cría dando a una mitad de su producción contacto con madera mientras que la otra mitad se guarda en tanques de acero inoxidable, para luego mezclarlas. “Es un vino elegante, con la estructura y bouquet propios del Pinot Noir de Mendoza, que a diferencia de los sabores frescos de frutas rojas que podríamos encontrar en vinos de ésta cepa hechos en la zona de la Patagonia argentina, aquí se presenta con madurez, con notas de frutas pasas”, precisa.
Del Pequeñas Producciones Chardonnay, Pablo cuenta que es 100% de esta cepa, siendo un vino “del que estoy enamorado. Puede soportar el plato que te imagines. Es un Chardonnay estilo California, con manteca, vainilla, maloláctica, pero a la vez con una acidez que permite que no te empalagues”. 
CRECIMIENTO. Tenguerian comenta que visita Asunción hace ya muchos años, en los cuales ha visto al consumidor paraguayo cambiar de manera impresionante. “Hoy está abierto a cualquier cosa de calidad, mientras antes al buscar calidad consumía solo whisky. Hoy prueba vinos”, señala. Tanto han cambiado las cosas, destaca, que la empresa representante de Escorihuela Gascón en nuestro país, la importadora Frutos de los Andes, se decidió traer un Pinot Noir, “cosa impensable años atrás”. 
“En mi trabajo estoy volcado a los mercados de Argentina, Uruguay y Paraguay, donde tenemos un promedio de ventas de 35.000 cajas mensuales. De esas, en cada línea el 80 a 90% es Malbec. El resto se reparte entre los demás tintos, espumantes y después blancos. Que en Paraguay se importe Pinot Noir es una muy buena noticia”, destaca.
De hecho, y para comentarnos una novedad de la bodega al paso, Pablo dice que si tenemos que establecer un orden de cepas en Argentina, éste lo preside el Malbec, seguido del Cabernet Sauvignon, después Syrah y luego Pinot Noir entre las tintas. Más hoy día se suma de manera interesante el Cabernet Franc. “Una cepa que me encanta, aunque que todavía no tiene su personalidad bien definida en cuanto al terruño en Argentina. Hicimos un Pequeñas Producciones con 3.000 botellas que salen a venta a fines de octubre en el mercado argentino.
Finalmente, Pablo cuenta que la bodega está empezando a desarrollar los terruños, es decir, criar la misma cepa en diferentes zonas de Mendoza para obtener sus diferentes cualidades. Es algo tan novedoso en Escorihuela Gascón, que está proyectado para el año próximo, tras haberlo decidido a principios del pasado setiembre. Sin dudas, ¡nos seguirán trayendo más novedades!
---
Leé también: